PLACERES SUBTERRANEOS

Tomé la linea D, del subte. Me encontraba a 15 paradas de mi punto de
llegada. 6pm, hora punta, se sabe que para poder entrar en uno de los
vagones es difícil y hay que tener suerte, por que siempre estan
reventando de gente a esa hora.
Logré subirme en el vagón que más gente tenía, logré escabullirme entre
los cuerpos apretados y me fuí hacia el medio. Una vez ahí, cerré los ojos
y me relajé, pegué mi espalda contra la persona que tenía detras, al no
sentir rechazo acerqué mi cuerpo entero , cada vez entraba mas gente, y
cada vez nos apretabamos mas.
Con los movimientos que hace el tren, podía sentir de forma ritmica la
respiración en mi cuello, me gustaba esa sensación, yo me agarraba
fuertemente del pasamanos de arriba, y me dejaba llevar por los
movimientos de la máquina.
Poco a poco empecé a sentir algo duro en mis nalgas, así que me empecé a
pegar mas y mas a eso duro, sentí una mano que entraba por debajo de mi
mini, y me tocaba una nalga, la acariciaba suavemente, me daba pequeños
pellizcos, ahora me tocaba ambas nalgas con su mano, pasaba un dedo,
como siguiendo la linea de la raya, de arriba a abajo, cada subida y cada
bajada metía mas el dedo, como queriendo abrir un poco mis nalgas, yo
seguía bien agarrada del pasamanos, con los ojos cerrados, me gustaba lo
que sentía, la gente seguía apretando mas y mas.
Ahora el dedo se escabullía mas hacia abajo, y me tocaba los labios
vaginales, y lo volvía a subir, y nuevamente hacia abajo, y hacia arriba, de
pronto el vagon se detuvo, estaba todo oscuro, la gente empezaba a
susurrar, nos habiamos detenido en medio del camino, las luces del vagón
se prendian y se apagaban. Se escuchó la voz de la operadora de trenes
decir que se tardarian unos minutos en seguir el recorrido por problemas
con uno de los vagones de la parte delantera.
Cuando el tren se detuvo, el dedo se detuvo también, desapareció, sin
embargo, yo seguía sintiendo el cuerpo tras de mi.Esperamos cerca de 10 minutos, y el tren nuevamente se puso en marcha,
esta vez, algo más se puso en marcha también.Ya no era un dedo el que me rozaba mis partes íntimas, era algo mas
grande, y mas grueso que hacía el mismo recorrido, lo cual hizo que
abriera mas las piernas, sentía "eso". grande, duro, caliente, que me
rozaba, y hacia que me moje mas y mas.
Ahora las curvas del tren eran mas violentas, iba más rápido, eso hizo que
me penetrara con mayor facilidad,el tren se movia, nosotros también, la
tenía muy grande y dura, sentía que en cada empujón se metía mas
adentro de mí.
Sentía que en cualquier momento iba a explotar, y yo también, se
calentaba aun mas con la fricción de nuestras pieles, sentía que la piel me
quemaba, sentía mis mejillas que cambiaban de color, que se volvian
rosadas, la cara me quemaba, el cuello...el pecho, mi respiración se hizo
entrecortada, aun mantenia los ojos cerrados y me mordía los labios.
De pronto..lo sentí...sentí esa mágica explosión dentro de mí..fue como si
perdiera el conocimiento por breves segundos, me encontraba como en
otro mundo, en un adormecimiento pasajero.
Cuando abrí los ojos, ya habiamos llegado a mi estación.

Me acomodé la falda y salí acompañada de la masa de gente que iba
conmigo en el tren.

Al llegar a la calle, soplaba un viento frío.

Nunca supe quien fue.