martes, mayo 09, 2006

TAXI



Salí de mi casa a las 5 de la tarde, era una tarde fría, con mucha neblina, por suerte iba abrigada, llevaba botas negras hasta la altura de la rodilla, con un poco de tacón, un sobretodo negro con bolsillos a los lados y los cabellos sueltos.

Decidí caminar,queria respirar aire,sentir el frío en mis mejillas, sentir el viento enredando mis cabellos...caminar.

Llegué a la avenida Javier Prado, eran cerca de las 7 de la noche, me paré un rato en la vereda, viendo los carros pasar, pasaban muchos taxis, amarillos, blancos, camionetas, ticos,etc.. el que menos queria llevarme, algunos me hacian señas con las luces, otros pasaban lentamente a mi lado diciendo "taxi", otros me hacian un gesto con el dedo levantado como cuando estas en el colegio y quieres responder una pregunta y levantas el dedo... ninguno de ellos me apetecia.

Paso un carro de color azul, donde en la luna delantera habia un cartel que decia "taxi", el chofer tenia semblante palido, cabello negro, se veia fortachon, serio.. no hizo ningún tipo de aspaviento, ni juego de luces, ni nada. Ya se estaba pasando..cuando le grite "taxi"!, paro unos cuantos metros mas alla y me subí.

Cuando ya estaba sentada, el seguia manejando sin preguntarme donde iba, solo le dije:

- hace frio

el no dijo nada,solo movió la cabeza asintiendo.

Empecé a mirarlo con detenimiento, su espalda, ancha, maciza, sus orejas pequeñas, tenia un bonito perfil,busqué su mirada en el espejo retrovisor, y ahí estaba él, mirandome, tenía una mirada dulce, sus ojos eran almendrados y pardos, me miraba fijamente, yo sentía que me empezaba a humedecer, miré por la ventana y vi que estabamos por miraflores; me voltié y lo vi mirandome nuevamente por el espejo retrovisor, crucé las piernas, me abrí un poco el sobretodo y le dije, vamos a un hostal.

El volvió a asentir con la cabeza, y siguió conduciendo.

Llegamos al telo, era una casa en miraflores, nadie podría decir que era un hostal, no tenía ese aspecto, era bonito, cómodo, algo elegante, nos dieron la habitación 133, quedaba al fondo de la casa, en un primer piso, con una enorme ventana estilo colonial, una cama matrimonial, un baño completo, una tv, tenía lo necesario.

Y ahí estaba yo, con el chofer del taxi, ambos en silencio..pero con la mirada fija en los ojos del otro, se acercó a mí, y me acarició el cabello, luego me soltó el cinturón del sobretodo, y me lo abrió,llevaba unas medias de encaje hasta los muslos, donde se sujetaban con bandas de silicona, ropa interior negra de encaje, me quitó suavemente el abrigo y me empezó a besar el cuello, lo hacía suavemente, podía sentir su respiración, su saliva, su lengua, yo sentía que me excitaba, una de sus manos empezó a tocarme los senos, pero por encima del brassiere. Se quitó el polo verde, y asi pude ver su cuerpo, era perfecto, precioso, se sentó sobre la cama y me acercó hacia él y me empezó a acariciar la barriga, besandomela, lamiendo mi ombligo, subió la mano izquierda y la metió debajo de mi brassiere, y comenzó a jugar con mi pezón, me daba pequeños pellizcos, y luego frotaba la palma de su mano contra el pezón, la otra mano la tenía en mi culo, de donde me apretaba contra el. De pronto empecé a sentir sus dedos metiendose debajo de mi tanguita, empezaron a recorrer mi culo, y ahora hacian circulitos al rededor de mi ano, cada vez sentia que me mojaba mas y mas....sentia seca la garganta, pero no podía abrir los ojos...me gustaba sentir todas esas cosas ricas que él me hacía.

Corrió la mano derecha de mi culo hacia adelante, la paso por mi vagina y la subió por el clitoris, luego la volvio a bajar hasta mi vagina , la cual ya estaba sumamente jugosa,hizo el mismo movimiento dos veces mas y la última vez la llevo hasta mi culito, y metió un dedo por mi ano, yo solo lancé un gemido, me sacó la tanguita y con toda la delicadeza del mundo me recostó en la cama, me abrió las piernas y se quedó observando por unos minutos mi sexo, volví a sentir sus dedos yendo de mi vagina hacia mi clitoris, y de mi clitoris pasando por mi vagina y llegando hasta mi ano, empezó a jugar con sus dedos... y me dijo "que rica conchita tienes, es la mas bonita que he visto en mi vida", yo no pude responderle, estaba extasiada...habia sucumbido al placer máximo, me encontraba en un estado donde me había desconectado de todo..me sentía super excitada...

Penetró mi ano con sus dedos..los movía..podía sentir los movimientos...se sentía tan rico...tan rico..no quería que nunca termine, con la otra mano me metió dos dedos por la vagina, y los movía también, acercó su cabeza y empezó a pasar su lengua por mi clitoris...dios!! habia llegado al paraiso!!! podía sentir su lengua jugueteando con mi clitoris, suavemente, luego chupaba mis labios, sacaba sus dedos de mi conchita y pasaba su lengua por ella...sentia su lengua entrar y moverse en mi sexo..era lo mas placentero que habia experimentado...nadie habia metido la lengua asi dentro de mi...ahora yo gemia mas, y mas...pero cuando ya estaba a punto de llegar, el se alejó de mi, y cuando escuchó que mi respiración se normalizaba volvió hacer lo mismo, esta vez, metió su lengua en mi culo mientras sus manos jugaban con mi vagina y mi clitoris...

Solo podía pensar en esos momentos lo mucho que deseaba que me penetrara, quería sentirlo dentro,moviendose..intenté cerrar las piernas para sentarme y así poder llegar a el, pero el no me lo permitió, solo me dijo "podría quedarme hundido en ti toda la vida, no sabes lo rico que es esto" y siguió lamiendo mi sexo, yo ya no podía resistirlo mas...y me deje llevar...tuve muchos orgasmos, y llegué al extasis muchas veces, y él seguía ahí, lamiendo,chupando,acariciando...

En eso sonó su celular, al parecer necesitaban que haga una carrera, el solo dijo, en 30 minutos estoy llegando, ok ok, y colgó. Se incorporó, cogió su polo verde y entró en el baño, yo me incorporé, me acomodé el brassiere, me puse mi tanguita húmeda, me arreglé las medias de encaje, cuando intenté pararme sentí como las piernas me temblaban. El salió del baño, se acercó hacia mi y me puso mi abrigo, me amarró el cinturón , me paso la mano por mis cabellos, y con una cara de ternura me dijo "lo pasé bien".

Salimos del hostal y subimos al auto, yo iba sentada en el asiento trasero, nuevamente el manejó sin preguntarme donde iba, nuestras miradas se cruzaron un par de veces por el espejo retrovisor, me dejó en el mismo lugar de donde me habia recogido, ni un paso mas ni un paso menos, era el lugar exacto.

- cuanto es? (le pregunté)
- 5 soles por la carrera, señorita

le di la moneda de 5 y me bajé del auto, y le dije "gracias".

Parada ahí, entre la neblina y la oscuridad de la noche, solo pude ver como el auto azul se alejaba.

PHOTO BY J.MICHAEL

4 comentarios:

MiHel... dijo...

A partir de ahora pensaré dos veces antes de subirme a un taxi de color azul...pero lo que si no haré nunca es mirarle a los ojos al taxista..puede ser peligroso..avisaré a mis hermanas..juummmm

Mi lado oscuro dijo dijo...

jajajajajajaja....

Carlos Roberto dijo...

Hotra historia interesante... me gusto... estare vistando mas seguido tu blog... linda

Sex Shop dijo...

Muy buenooooo!!!!!!!